Ramallah (UNA/WAFA) – El Ministerio palestino de Asuntos Exteriores y Expatriados pidió a la comunidad internacional que asuma sus responsabilidades morales y legales hacia los detenidos en las cárceles israelíes.
El Ministerio de Asuntos Exteriores palestino dijo en un comunicado emitido el jueves que la cuestión de los detenidos representa uno de los problemas humanitarios y nacionales más urgentes y encarna un claro ejemplo de las políticas represivas de la ocupación que violan sistemáticamente el derecho internacional humanitario, en particular las Convenciones de Ginebra y el derecho internacional de los derechos humanos.
Señaló que las cárceles de la ocupación no sólo son una herramienta de represión legal, sino también una herramienta de intimidación y un medio para debilitar el tejido social palestino y atacar su resiliencia. Estas prácticas incluyen negar visitas a los detenidos, confinamiento solitario prolongado y castigos colectivos contra ellos y sus familias. Lo que están viviendo no es sólo una violación legal, sino un sufrimiento humano cotidiano practicado frente a un mundo que permanece en silencio.
Instó a la comunidad internacional, en particular a las Altas Partes Contratantes de los Convenios de Ginebra, a romper el muro de silencio, adoptar medidas inmediatas para proteger a los detenidos y exigir a Israel, la potencia ocupante ilegal, que rinda cuentas por estos crímenes constantes.
El Ministerio de Asuntos Exteriores palestino también pidió que se pusiera fin a la política de detención administrativa y que se concediera al Comité Internacional de la Cruz Roja acceso inmediato y regular a las cárceles para inspeccionar las condiciones de los detenidos, de conformidad con los acuerdos pertinentes.
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