Ramallah (UNA/WAFA) – El Ministerio de Asuntos Exteriores y Expatriados de Palestina renovó el jueves su llamado a la comunidad internacional para que adopte medidas urgentes y efectivas y obligue a la ocupación israelí a detener su agresión en Cisjordania, incluida la Jerusalén ocupada, en medio de la comisión de más crímenes y la destrucción sistemática de las necesidades de la vida, y a lograr un alto el fuego sostenible en la Franja de Gaza.
Dijo que la ocupación está cometiendo el crimen de desplazar por la fuerza a más de 30 ciudadanos palestinos de sus hogares, arrasar la infraestructura, demoler casas y cambiar las características de los campamentos palestinos, así como incursiones militares en pueblos, campamentos y ciudades palestinas en toda Cisjordania, acompañadas de destrucción, vandalismo y manipulación de viviendas, aterrorizando a civiles pacíficos, incluidos niños y mujeres, arrestos masivos aleatorios y privando a los ciudadanos de sus libertades civiles básicas, más notablemente su libertad de movimiento en su patria, en las formas más feas de los sistemas de apartheid colonial.
El Ministerio de Asuntos Exteriores pidió posiciones internacionales serias para detener la actual agresión contra el pueblo palestino, y no conformarse con condenas o expresiones de preocupación o temores, señalando que el silencio internacional sobre estos crímenes alienta a la ocupación a seguir cometiendo más de ellos y le proporciona el tiempo necesario para completar los crímenes de limpieza étnica, desplazamiento y anexión.
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